Páginas

martes, 14 de octubre de 2014

LA MÚSICA NUNCA SE DETUVO

Manuel López Azorín nos habla de la antología del poeta barcelonés Abel Santos, DEMASIADO JOVEN PARA EL BLUES, Antología personal 1998-2014, con prólogo de Javier Cánaves. Un libro que estará disponible en librerías en el 21 de noviembre y que reúne una selección de su obra tras 16 años escribiendo y publicando poesía.

Citas musicales y poéticas sirven para introducirnos en “el agridulce blues de la 
vida”, una antología personal con poesía que parece acercarse al realismo sucio; pero con variantes de pensamiento reflexivo y de poesía de la otra 
sentimentalidad o, como es más conocida, de la poesía de la experiencia.


Abel Santos, en esta antología, nos ofrece una poesía de voz personal con grandes referencias musicales, cultura popular, con acercamientos al llamado “realismo sucio”, aunque más que realismo sucio yo, me atrevería a llamarlo realismo social-marginal o realismo de clases, es decir, poesía en defensa de los olvidados, de los marginados, de los perdedores (ya en los años 90 L. A. de Villena escribía con realismo social en su libro “marginados”) y lo hace con poemas sobrios y directos primando el lenguaje cotidiano de denuncia entremezclando, al tiempo, emociones y creencias.

Poesía urbana, desasosegante a veces, con la dureza de la sociedad que nos maneja y nos conduce y nos manipula y, también, la ternura del humano desamparado en ocasiones, batallador en otras, crítico, con bandera de compromiso, de denuncia, de conciencia reflexiva… Y todo ello en una poesía autobiográfica, confesional, intimista en la que el sujeto poético, con total libertad de expresión, utiliza el lenguaje popular de la propia experiencia y lo convierte en poético. Sorprende con giros inesperados, emplea palabras que me hacen recordar al poeta Rafael Morales cuando me decía que “Da lo mismo rosa que ladrillo, si se colocan en el momento justo, en el lugar preciso”. Y así este sujeto poético nos muestra sus preocupaciones, con una poesía libre de métrica, ya clásica, ya tradicional, pero con buen sentido rítmico con la que reflexiona y nos hace reflexionar sobre sus inquietudes y sobre la inquietud general.


María Consuelo Altable, editora de Eirene Editorial,
y el poeta Abel Santos.


En esta antología que recoge poemas de tres libros y unos cuantos inéditos, se perciben influencias de poetas como Roger Wolfe, Raymond Carver, Bukowski, e influencias del cantante –poeta Leonard Cohen.
La antología está plagada de citas musicales y literarias de, entre otros, The Doors, Eric Clapton, Ryan Adams , así como de Andrés Suarez, Bunbury, Enrique Urquijo, y Camarón de la Isla; y de los poetas, entre otros, Gamoneda, Houellebecq, Benedetti, Bécquer, William Blake , García Montero, Brossa , Cortázar, y Dámaso Alonso.

Javier Cánaves en la introducción a manera de prólogo que se incluye en esta antología nos dice: Me lo imagino conmigo en este bar, porte serio, gafas oscuras.(…) Pese a que habla de sí mismo, en realidad siento que lo hace de mí. «Cada uno de nosotros», dice, «camina su propio abismo y, al final, todos los abismos, en mayor o menor medida, se acaban pareciendo. Hay vértigo y sed, caída y amor, perplejidad y júbilo, todo lo que nos hace llorar y temblar, escupir y dar las gracias… No pretendo ser original, simplemente aspiro a darme en cada verso. Puedes llamarlo amor o impudicia, valentía o hacer el tonto, no me importa. Tú y yo pasaremos, pero no este blues en que vivimos, descomunal e íntimo, doloroso como el amor y placentero como la pena».



En una poética aparentemente descarnada que apuesta por el no clasismo, aboga por la igualdad de oportunidades, critica la hipocresía, el consumismo de esta sociedad y defiende, con ironía y ternura, el camino de una vida mejor y más humana, lo hace mostrando el calor del hombre solidario que piensa en el hombre, que cree en el hombre a pesar de…


Poemas los de esta antología en los que Abel Santos muestra también influencias culturales diversas: de sabor popular, algo de erudición…. mezclar lo culto con lo llano es algo que, con mucho acierto, viene haciendo Luis Alberto de cuenca desde su ya famosa “La caja de plata” de los años ochenta.



Demasiado joven para el blues es un buen libro que trasmite las emociones como golpes en la boca del estómago, un libro que toca los sentidos a buen ritmo, el ritmo de la conciencia crítica desde una poesía íntima y confesional.


Manuel López Azorín,
Poeta.




Más información sobre las novedades de Eirene Editorial y del festival poético musical que se hace el 21 de noviembre en Madrid en el blog del poeta Manuel López Azorín:

Enlace del evento de Eirene Editorial


NOTA EDITORIAL:

Con la compra de este libro está donando un euro a la Fundación Salud y Comunidad, organización sin ánimo de lucro, de ámbito estatal y con proyección internacional. La entidad tiene presencia en siete comunidades autónomas españolas.
Fue creada en 1997, como evolución de la Asociación Bienestar y Salud, fundada en 1989. Contribuye a la promoción de la salud, el bienestar social y la calidad de vida de la comunidad, mediante el desarrollo de proyectos de asistencia, reinserción, apoyo jurídico, investigación, formación o consultoría, siendo uno de sus principales ámbitos de actuación la asistencia y prevención de las drogodependencias.
Más información en: www.fsyc.org


La canción que nunca se detiene,
Everybody´s changing, de Keane.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

comentarios